La Diputación Provincial de Cáceres a través del Área de Cultura y Deporte, falló el pasado 30 de octubre la octava edición del Premio Cómic Manga.
Como novedad,este año la presidencia del Jurado ha estado ocupada por el historietista, dibujante, ilustrador y guionista cacereño, Fermín Solís, buscando de esta manera dotar de mayor calidad y rigurosidad a la selección de las obras premiadas.
Se han presentado un total de 22 trabajos originales e inéditos de temática, estilo y género totalmente libre, procedentes de toda la geografía nacional. Los proyectos, que se han presentado en formato físico y digital, han sido valorados por un Jurado que ha deliberado puntuando la originalidad de la obra, así como la calidad artística y la narración gráfica.
El veredicto del Jurado atendiendo a las dos categorías contempladas en las Bases ha sido:
En la categoría de más de 21 años, el Primer Premio, dotado con 2.000 €, ha recaído en Ojos de mar de Sara Martínez Maiso, una obra que nos habla de la capacidad de la infancia de mirar más allá, con su inocencia no contaminada, a la vez que nos recuerda la problemática de la emergencia climática.
Sara Martínez es una ilustradora logroñesa, graduada por la facultad de Bellas Artes del País Vasco y titulada en el doble máster de Profesorado en Educación Artística y Dibujo. Ha sido ganadora del II Concurso Nacional de Cómic Universo Goya de la Fundación Ibercaja y del IX Certamen de Ilustración de Cuentos, Leyendas y Tradiciones Sorianas y ha realizado murales para el casco antiguo de Logroño.
El Segundo Premio de esta categoría ha quedado desierto.
En la categoría de 14 a 20 años, el Primer Premio, dotado con 1000 € ha sido para el cómic Detrás de la nieve, una historia que nos habla de como muchas veces el miedo y el temor a lo desconocido nos impide conocer nuevas realidades maravillosas, obra de Eva Ferrer Argüello de 19 años, quien actualmente cursa estudios de Bellas Artes en la Universidad de Granada.
El Segundo Premio, dotado con 500 €, ha recaído en Penumbra, una historia con tintes terroríficos con de nuevo una protagonista infantil, obra de la gallega Olivia Prada Herrera, de 20 años, actualmente estudiante de Creación Digital, Animación y Videojuegos.
